Hermanas Zambrano: Patricia & Fede, una boda con encanto.

Hola encantos!

Normalmente los post que dedicamos a nuestros Encantinovios los escribe Patricia, pero esta vez, dada la situación, lo va a escribir Gemma (o sea yo) ¡espero estar a la altura!, y con eso de una ser la Novia y la otra una Dama no hubo mucho tiempo de hacer unas bonitas fotos como os venimos acostumbrando, pero gracias a los invitados y la fotógrafa Elisabeth Joya junto su segundo cámara Domingo del Castillo, hemos recopilado una buena selección :)

INFINITO AMOR

El pasado 6 de junio fue una fecha señalada para Hermanas Zambrano, pues Patricia y Fede se daban el esperado !SÍ QUIERO! rodeados de amigos y familiares. Una pareja hecha el uno para el otro, llenos de amor y que irradian felicidad allí a donde van.

Después de un largo noviazgo y haber decidido dar el paso más importante de sus vidas, lo tenían muy claro; su boda sería una gran fiesta, y por supuesto, el color predominante el morado.

Y como toda gran fiesta, se comienza con una monísima invitación. Siempre lo decimos, "la invitación es el primer contacto de tus invitados con la boda, depende del cariño y detalle que le dediques a tu invitación, así de especiales se sentirán tus invitados".

El vestido que llevaba Patricia es de la nueva temporada de Aire de Barcelona, ella lo personalizó con un precioso cinturón de piedras brillantes que le dio luz y realzó la belleza de la novia. Como complementos utilizó un velo corto que dejaba ver las espectacular espalda de encajes, un tocado de flores de seda y brillantes hecho a mano por Sibo Designs, unos comodísimos zapatos de Ángel Alarcón que ilustró Lillian Urquieta con el logo de la boda, y un ramo de flores de telas vaporosas en tonos blancos y morados con broches brillantes diseñado por ella misma.
Para el maquillaje confió en Laura, amiga de la familia y de que el peinado estuviese perfecto se ocupó Beatriz de Peluquería Magnolia.

Las seis damas de la novia; Ángela, Judith, Mireia, Ana, Sheyla y Gemma, que estuvimos en todo momento junto a la novia, elegimos un vestido de corte años 40 color morado con espalda descotada y complementos rosa palo. Los tocados los realizó Lilian Urquienta.

Los jardines del Palacete de La Najarra fue el lugar escogido para la Ceremonia. El entorno proporciona la intimad que el evento se merece y favorece al encanto del momento.

Pero para que la boda tuviese sentido de principio a fin y todos los presentes allí se impregnasen de la esencia de los novios y de su historia de amor, se diseñó una decoración acorde con la personalidad de Patricia y Fede, y se crearon detalles únicos que llenaron de magia y encanto los jardines.

A las 12:30h Fede esperaba junto a su madre y resto de amigos y familiares la llegada de su futura esposa. Cuándo el Cuarteto Albayzín comenzó a tocar el tango "Por una cabeza", las damas entraron al recinto anunciando con un cartel de corazones colgantes la llegada de la novia y con unos conos gigantes llenos de pétalos abrían paso, seguidas de los dos simpáticos pajes que portaban las arras matrimoniales y las alianzas en un bastidor que la Dama Ángela había preparado.

Paseamos por una larga alfombra morada y serigrafiada con el logo nupcial, rodeada de árboles con coronas florales de las que colgaban cientos de lazos, hasta llegar al final dónde una gran cortina de corazones hacía de pared de la mesa que portaba un centro de dalias y unas letras en color plata y purpurina morada con el lema de la boda: "AMOR". Todas las sillas estaban vestidas con un lazo, excepto las del pasillo que además tenían un portaretrato con fotografías de la preboda de los novios.

Una vez convertidos en marido y mujer, durante las felicitaciones se pudo degustar en el Drink Bar de limonada fresquita, licor de mora ¡cómo no! y un riquísimo cóctel Tropical que la Heladería Daniel preparó para la ocasión.

El tradicional arroz se sustituyó por confeti de purpurina,¡el aroma fantasía nos envolvía! y en los abanicos pai-pai se encontraba toda la programación del evento.

Para ir al convite se dispuso del tren turístico "Tropico Express Almuñécar", que recogió en la entrada del palacete a los novios acompañados de los invitados y que nos llevó al destino dando un divertido paseo.

El convite tuvo lugar en el Hotel Bahía Tropical***, primero con un cocktail que se sirvió en la terraza chill out dónde nos podíamos hacer fotos en un photocall, y luego en el salón con un gran banquete.
A diferencia de la ceremonia, aquí añadimos al morado y blanco de la decoración más colores para dar esa pincelada festiva. Y un toque de inspiración mexico-neyorkino, ya que ese fue el destino elegido para la luna de miel.

En el salón se diseñaron y decoraron diferentes rincones y espacios para una mejor comodidad y que nada entorpeciese el ritmo de la boda:

-Señalética para no perderse ni una.

-Un seating plan original y divertido con fotos de todos los invitados ¡fue una gran sorpresa, nadie se lo esperaba!

-"La esquina del fumador", adaptamos un área al aire libre con cigarrillos, ceniceros y cerillas que invitaban a dar besos de tornillo.

-Minutas con instrucciones para no aburrirte en la fiesta.

-Centros de mesa totalmente personalizados por colores que incluían una botellita de tequila y vasos de chupitos para hacer un brindis, además cada mesa tenía designada una canción ¡que luego tenía que defender!

-Kit de emergencia en el que no faltaba de nada para continuar la fiesta tan guapos como empezamos ;)

-Un Candy bar en el que pudimos ponernos el delantal y hacer una auténtica nube de azúcar de algodón (el dulce preferido de Patricia en la feria)o degustar los riquísimos pasteles y sabrosos cupcakes que la Dama Judith preparo con tanto cariño y que fueron un éxito ¡no quedó ni uno!.

-Un Rincón de firmas que fusionamos con el iluminado photocall, pues para dedicarles unas palabras en el álbum era necesario primero disfrazarse y hacerse una foto con la cámara instantánea polaroid. También pudimos firmar con nuestras huellas en un cuadro que dibujaba un árbol.